El tenis es un deporte que tiene una dinámica muy cambiante ya que un jugador puede participar hoy en un torneo y la semana próxima participar en otro que puede ser en el otro lado del mundo. Además, cada una de estas competencias tiene sus propios detalles únicos que complican aún más un deporte de por si exigente.

Esto ocasiona que muchos factores terminen por influenciar el rendimiento de un jugador y para alguien que forma parte del mundo de las apuestas deportivas, específicamente en las apuestas de tenis, esto son detalles importantes.

Cosas como que tan pesada o ligera es la pelota con la que se juega el torneo o las condiciones climáticas como que tan alta pueda ser la temperatura o la humedad del lugar donde se dispute el torneo, pueden hacer que un jugador tenga mayor o menor posibilidad de ganar un partido.

Uno de estos factores (quizás el más importante) es la superficie donde se realiza el torneo. Esto es un tema que ha dado para muchas discusiones a lo largo de la historia del tenis debido a las distintas opiniones que pueda tener cada aficionado y como afecta una superficie u otra a su jugador favorito.

Así como no existe la perfección, tampoco existe el jugador de tenis definitivo (ni siquiera Federer) ya que cada uno tiene un estilo de juego que se ve favorecido o perjudicado por, entre otros, los factores mencionados anteriormente así como por el estilo de juego del rival.

Al ser un deporte individual (salvo por los dobles), el tenis depende en gran medida del factor humano y de como cualquier detalle puede influenciarlo. Es por ello que en el mundo de las apuestas de tenis, la superficie tiene un papel esencial.

Las superficies del tenis se pueden dividir en hierba, cancha dura y tierra batida, cada una de ellas con sus propias características y particularidades. A continuación voy a dar una breve explicación de cada una y cómo puede afectar nuestra apuesta deportiva.

  • Hierba. El tenis más rápido se practica sobre esta superficie y se suele jugar bajo lluvia lo que empeora esta condición ya que muchos de estos torneos se juegan en el Reino Unido. También el hecho de que la pelota se hunde ligeramente más que en el resto de superficies complica la adaptación de los jugadores. Siempre es recomendable colocar el dinero de tu apuesta de tenis en especialistas de hierba cuando se juega en esta superficie así su rival este en un puesto superior en el ranking ATP.
  • Tierra batida. También conocida como polvo de ladrillo, es el caso opuesto a la hierba, aquí el juego es el más lento por lo que la tranquilidad mental del jugador y su facilidad para desplazarse por esta superficie son claves. La condición física del jugador también es esencial ya que la pérdida de velocidad de la pelota aunada a un movimiento rápido por parte del jugador le pueden ayudar a llegar a bolas que en otra superficie no podría.
  • Cancha dura. Podría considerarse como el equilibrio entre las dos superficies anteriores, sobre todo en lo relacionado a la velocidad del juego. Los movimientos en cancha dura no son tan sencillos como en tierra batida por lo que un buen saque resulta siempre complicado por ende un buen sacador es una apuesta de tenis casi segura.